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Showing posts from 2023

Acción de Gracias

  Se dice que los peregrinos del barco Mayflower llegaron en otoño y no bajaron a tierra hasta marzo siguiente. Se quedaron en el barco a causa del invierno, que en Nueva Inglaterra no es cosa de juego. En la primavera, cuando comenzaron a repartirse las parcelas de cultivo, se les acercó Squanto, un indio que les enseñó a sembrar maíz y calabazas, lo mismo que a cazar. El indígena Squanto sabía inglés porque anteriormente fue capturado por ingleses y llevado a Inglaterra como esclavo. Más tarde se escapó y pudo volver con los suyos.   Mientras que los holandeses (y otros ingleses que imitaron el modelo) concibieron su actividad colonizadora como una iniciativa comercial de empresarios e inversionistas, los ingleses del Mayflower llegaron al modo de inmigrantes refugiados para poder vivir en paz y libertad. En ese sentido también se distinguieron de los españoles, que por su parte llegaron como conquistadores a nombre de la Corona. Mientras que otros tenían la alternativa de levantar a

La invasión de Gaza

  Los humanos somos territoriales de nacimiento porque es un mecanismo de supervivencia. De igual manera que nuestro cerebro está ordenado a la supervivencia así vamos orientados a ocupar territorios en grupos. De la misma manera está en nuestros genes, la inquietud de migrar. Salimos originalmente de África y del Oriente (según los restos fósiles humanos más antiguos) y nos dispersamos por todo el mundo en busca de comida, sí; pero también enamorados por los lugares y paisajes que encontramos.  La tragedia de judíos y palestinos puede verse como un capítulo más del llamado de Dios a los hebreos, para llevarlos a la Tierra Prometida. Originalmente Dios llamó a Abrahán a salir de su tierra natal para venir «a la tierra que yo te mostraré…. A tu descendencia he de dar esta tierra.» (Génesis 12,1.7). Sólo que aquella tierra estaba ocupada por los cananeos. Pero nótese que en la historia de Abrahán él y su familia  convivieron con los habitantes de la región sin que se mencione alguna guer

Inteligencia y educación

Al ir a un negocio de comida rápida a veces parece que uno conversa con un autómata. Es la maldición de la inteligencia artificial a la que ya estamos sometidos, cuando las relaciones humanas siguen los esquemas de unos guiones programados. No da tanto miedo la aplicación cada vez mayor de la inteligencia artificial, cuanto el modo con que los mismos humanos parece que ya no saben pensar al modo «natural». Es algo así como el caso imaginario del que en el restaurante le pide al robot camarero que le pase la sal. «Por dónde se la paso,» contesta el robot que desconoce la diferencia entre «pasar» y «pasar».  Los libretos en nuestras relaciones sociales siempre existieron. Es como saber qué decir, cómo comportarse en una reunión y darle la mano al enemigo. Pero mal estaríamos si sólo supiéramos pensar al modo de las fórmulas. La capacidad para entender aparte de fórmulas parece estar cediendo a los intercambios automáticos, completamente impensados.  Ya en la década de 1970 apareció el pr